Conseguir mejores recuerdos es posible si mejoramos nuestra fotografía en la playa con unas pautas sencillas

Cuando nos vamos de vacaciones siempre soñamos con tener una fotógrafa o un fotógrafo profesional que nos siga a todas partes y retrate cada instante. Evidentemente esto no es lo que la mayoría de los mortales puede hacer, por lo que terminamos haciéndonos cargo nosotros mismos de tomar las fotografías. Y no es sencillo hacer una buena fotografía en la playa.

Foto de Gustavo Linhares

A no ser que seamos fotógrafas o fotógrafos profesionales, es muy probable que haya un gran porcentaje de tomas que no transmita lo que realmente quisimos retratar al momento de presionar el disparador. Se requiere de un poco de técnica, otro poco de criterio y un poco más de paciencia para lograr fotografías que satisfagan a todos y a todas.

Ya sea que vayamos de vacaciones a la montaña, la nieve o a la playa, el equipo con el que contemos para hacer las fotografías también influirá en la calidad final de las mismas. Pero una cosa es segura: la calidad de la cámara no es suficiente para que las fotografías que hagamos sean buenas.

Si contamos con una cámara estándar o simplemente nos vamos de vacaciones con nada más que la cámara que viene incorporada en el teléfono móvil, deberemos esforzarnos un poco más para lograr imágenes agradables, representativas y memorables.

Cuidado al tomar fotos en la playa

Cuando tenemos un paisaje como la playa, antes de comenzar a tomar fotografías debemos prestar atención a una serie de cosas que evitarán que el equipo con el que las tomemos se arruine. Debemos proteger la cámara de la arena, del sol y del agua para asegurarnos poder seguir tomando fotos durante todas las vacaciones. Una vez que estemos atentos a esto podremos enfocarnos en la calidad de las fotos.

Para evitar lo que se llama una sobre o una sub-exposición, debemos apuntar la lente de la cámara en un ángulo que no sea ni directamente contra el sol ni directamente a sus espaldas, ya que cualquiera de estas dos opciones generará efectos de saturación y contraste extremos, afectando la calidad de la imagen general.

Foto de Wendy Wei

Elige la hora adecuada del día

Las horas de luz diurna no son las más apropiadas para hacer fotografía en la playa, ya que la luz es muy dura y el contraste entre luces y sombras es muy alto; a no ser que se trate de un día nublado, en cuyo caso la luz será difusa, aunque recuerda que siempre puedes ayudar a tu cámara acoplándole un filtro ND de la densidad que tú consideres correspondiente.

Para evitar que tus fotografías salgan subexpuestas o sobreexpuestas, lo mejor es, como ya adelantábamos anteriormente, hacerlas temprano por la mañana o por la noche, más o menos durante el amanecer o el atardecer, mientras se está produciendo la “hora mágica” (hora dorada u hora azul). En este espacio de tiempo, la luz es más suave y se consiguen tonos más balanceados, por lo tanto no será complicado conseguir una buena imagen.

Si lo que quieres es trabajar con fotografías de retrato durante el día, te vendrá bien un truco que puede ser fundamental para ti estas vacaciones. Como podrás comprobar cuando realices tu fotografía en la playa, aparecerán sombras en la cara, que suelen ser producidas por sombreros, gafas, nariz y demás, ¿cómo evitarlo? Te recomendamos que utilices un flash de relleno. Te permite aclarar las zonas de sombra más intensas y los detalles podrán apreciarse sin problema.

Con estas pautas, esperamos que estés un poco mejor preparado para hacer buenas fotos en la playa este verano. ¡¡Estaremos encantados de que compartas las mejores con nosotros y con el resto de playeros!!